Un mundo competitivo, voraz, depredador, pecuniario. Una especie programada, sin darse cuenta, para competir por dinero. El que más gane, el que más haga, utilizando algunas veces recursos naturales de forma desmesurada impactando directamente el equilibrio y otros seres humanos. Desde su base, la sociedad productora, hasta la cúspide de esta jerarquía, el banco central de los asentamientos de la creación del dinero.
Los nuevos emprendedores, los nuevos creadores, pero con sentido, tienen la tarea de mitigar los impactos ocasionados por generaciones anteriores. Las nuevas generaciones son las llamadas a crear nuevas realidades para edificar una mejor humanidad.
Emprender es un término utilizado para los negocios, también puede ser utilizado para tomar acción en cualquier asunto. Emprender del latin <<en> que significa dentro o sobre y <prendere>, quiere decir coger o tomar. Es decir, tomar el manejo, apersonarte de algo. Por ejemplo, emprender un nuevo modelo de vida para librarme de lo que es destructivo.
Si utilizamos este término, para tomar asuntos en nuestras manos, podemos decir que estamos en modo emprender, en una actitud crear.
Todos los humanos nacimos con la facultad divina de ser creadores (Emprendedores)
En alguna parte de la historia, decidimos empezar a llamarnos con cierto orgullo competidores, y comenzamos a competir con nuestras capacidades creadoras. Competir es luchar por la busca de un premio, la cuestión es vivir presionado para la consecución de dinero. A la final, todo esta resumido al intercambio y transformación de recursos en dinero. Tiene esto algún sentido? El sentido ha tomado un rumbo equivocado. La actual humanidad se caracteriza por utilizar diferentes trucos y artimañas para luchar para la consecución de algo, es decir, en la psiquis hoy existe una naturaleza depredadora que utiliza erradamente la finalidad de la competencia empresarial. El uso de la razon en el buen sentido esta perdido.
Muchos perdieron su capacidad creadora, ahora solo compiten por tener más dinero. Por eso cambian tiempo por dinero.
Pero se puede dar un salto hacia otra escala evolutiva, otro nivel de percepción de la realidad material. Que pasaria si en vez de hacer lo que toca, hicieras lo que deseas hacer? Que pasaria si en vez de cambiar tiempo por dinero, comenzaras a crear nuevas objetos, expresiones o productos mejores que los existentes? Que pasaria si dedicaras tu vida a utilizar esa capacidad creativa innata de hacer lo que gustas?
Cada da uno de los seres humanos cumple diferentes funciones dentro de la sociedad, pero qué pasaría si viviéramos de nuestra vocación a través de expresarnos a nosotros mismos como deseamos, desde el arte, la transformación de recursos de una manera sustentable, que cada persona utilice sus capacidades y habilidades innatas para dar y servir con fundamento su contexto más próximo:
Emprender con sentido es encontrar un para qué hacerlo.
Como se hace esto? Emprendiendo de una manera creativa con sentido para la humanidad, renunciando la competencia depredadora que hoy existe bajo el pretexto de desarrollo y apuntando siempre a ser los únicos creadores de un nuevo sentido para nuestra vida para ir solucionando los problemas que hoy existen en las distintas áreas y expresiones de la sociedad.
Cuando vayas a emprender una nueva idea, haz estas dos preguntas:
- Que problema planetario estoy solucionando?
- Que estoy aportando para una nueva humanidad?
Si nuestros emprendimientos o creaciones con sentido no apuntan a estas dos preguntas estaremos creando sin sentido, jugando al mismo juego, emprender para competir en un ecosistema cada vez mas veloz, pecuinario y rapaz de los recursos existentes.
Completamente contrario en realizar nuevas creaciones con sentido profundo.