Hace unos días una amiga me comentó sobre una idea de montar su propio Spa. Me pregunto,
– ¿cómo puedo hacerlo? ¿Cómo desarrollar mi propio negocio?
Observo que muchas personas quieren cada vez más tener sus propios negocios y están buscando ideas para generar nuevos ingresos.
Sin embargo, no siempre lo hacen realidad. Es verdad, nadie nunca está suficientemente preparado para empezar y la incertidumbre siempre existirá, pero una vez que se empieza conforme pasan los días, los obstáculos, los límites mentales se transforman y las cosas se vuelcan a nuestro favor. Pero para llegar a ese punto, ¡Es necesario comenzar!
Comenzar es la mitad de cualquier acción – David Allen
En un blog anterior hablamos sobre el “Proceso para materializar ideas” el cual, incorporaba 4 pasos:
- Emanación
- Creación
- Formación
- Acción
Retomando un poco, quiero darte algunas herramientas que pueden ayudarte como:
Para la generación o emanación de las ideas: Buscar necesidades insatisfechas.
Para el proceso de Creación, crear un prototipo con tu idea
Para el proceso de formación Reestructurar
Para la acción se necesita
Buscar necesidades insatisfechas
La emanación de ideas es un paso fundamental en el proceso para materializar ideas de negocio.
¿Observas críticas sobre algún producto o servicio? ¡Quizá puedes ofrecerlo mejor!; ¿Fuiste a un lugar a cenar y no te gustó la atención? ¡Podrías tener un restaurante con un mejor servicio o quizá asesorar a restaurantes que tengas deficiencias en ese aspecto!
Las ideas pueden surgir en cualquier momento, pero es necesario estar en sintonía de búsqueda de necesidades insatisfechas ¡pasa de la protesta a la propuesta!
¡Hora de crear!
El segundo paso para materializar ideas es la creación. Haz muestras del producto o servicio y valídalo con familiares, amigos y especialmente asesores empresariales ¡Es una gran opción! Aquí puedes recibir críticas, aplausos, consejos, entre otros, esta retroalimentación puede ser significativa para empezar y realizar los cambios necesarios.

Reestructurar, reestructurar y reestructurar
El tercer paso para materializar ideas es la formación. Después de haber realizado la primera validación conviene no detenerse, ser perseverantes en la investigación, desarrollar los cambios y si es posible seguir validando el producto o servicio.
Conviene también mirar qué se está haciendo en el sector en el que estás y quienes lo hacen, buscar las mejores prácticas y tenerlas como referencia. Ajustar la idea con los diferentes recursos con los que dispones. Para ejecutar un plan o proyecto existen miles de formas de realizarlo. Solo debes salirte del cuadro, abstraerse y cambiar la perspectiva.
Aqui te dejo una serie de preguntas guía para la entrega de un producto tangible:
- ¿Puedo cambiar el material del producto y su empaque?
- ¿Conoces el precio que el consumidor final paga o cuando realizan compras por volúmenes (precio mayorista)?
- ¿La entrega la realizaras tu o otra entidad?
- ¿Tienes una red de contactos inicial para ofrecerles y comenzar a mostrar tu producto?
Hacia la materialización de ideas
El cuarto paso, la acción. ¡Muestra! ¡Ofrece! ¡Es hora de darte a conocer!
Ya iniciaste el proceso de arranque de tu idea para convertirla en un proyecto personal. Es hora de presentarlo al mercado, a las personas que tendrán la necesidad de utilizar tu producto o servicio..
¡No te paralices ante las críticas, especialmente las que están dentro de ti mismo! ¡Sé perseverante! “Que otros no lo hayan conseguido no significa que no puedas lograrlo”
¡Si te gusto, compártelo! Tal vez una persona que conozcas lo necesite para comenzar su Emprendimiento.
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